Vitrocerámica
Propiedades precisas cuidadosamente controladas
El proceso de la vitrocerámica consta de dos pasos: fusión de vidrio, incluido el conformado en caliente y la ceramización. El material resultante ofrece propiedades únicas, como una expansión casi nula en un amplio rango de temperaturas. El proceso de fabricación requiere una gestión precisa de la temperatura para lograr una homogeneidad excepcional y un control estricto de las especificaciones exactas.
Una historia de éxito única que se remonta a más de 50 años
SCHOTT lleva más de 50 años fabricando y desarrollando vitrocerámica. Durante ese tiempo, el material ha abierto nuevas posibilidades para ingenieros y diseñadores de todo el mundo, y para el espacio, al proporcionar materiales con un conjunto de propiedades únicas. Sus aplicaciones van desde los electrodomésticos, maquinaria y plantas de manufactura, arquitectura, litografía y metrología, hasta astronomía.
Resistente, fuerte y estética
La característica más importante de las vitrocerámicas LAS es su coeficiente de expansión térmica casi nulo, que las hace muy resistentes a temperaturas extremas, así como a los choques térmicos. Si se combina con una alta uniformidad, una fuerte resistencia química, propiedades ópticas personalizadas (transparencia, translucidez, opacidad) y posibilidades de diseño, se obtiene un material que añade la estética del vidrio a una amplia gama de aplicaciones.
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